
Peeling significa pelar, desprender las capas superficiales de la epidermis.
Se obtiene la eliminación de los estratos dañados de la piel y su renovación
aportando nueva estructura de colágeno.
Los resultados son excelentes, se borran o atenúan las arrugas y lesiones cutáneas
como las manchas, secuelas de acné y cicatrices.
Son de elección en envejecimiento facial y de cuello, acné, flaccidez, manchas solares,
del embarazo y cicatrices pigmentadas.
Existen varios métodos desde los más suaves a los más profundos, utilizándose distintas
sustancias dependiendo de la necesidad de cada caso.
El tratamiento médico consiste en el diagnóstico dermatológico, en la elaboración de un
plan o protocolo de tratamiento a seguir acordes a cada paciente (según edad, tipo de
piel, grado de lesión, actividad laboral, social etc.) y en la repetición de sesiones
terapéuticas.
La época es preferentemente cuando no hay riesgos de tomar sol ya sea en forma directa
como por el reflejo de los rayos UV, de todos modos pueden realizarse con el compromiso
del paciente de acatar todas las indicaciones médicas sugeridas para el
cuidado de los mismos.